lunes, 6 de diciembre de 2010

Spike Jonze

La cámara tiene vida por sí misma en los videoclips de Adam Spegiel, mejor conocido como Spike Jonze, uno de los directores estadounidenses más aclamados, creativos e innovadores.
Ha trabajado con bandas como Wax, Beastie Boys, The Pharcyde, The Breeders, Daft Punk, Fatlip, Weezer, Fatboy Slim, Dinosaurs Jr., The Chemical Brothers, Björk, entre otros.
Los videoclips que ha dirigido Spike Jonze se distinguen por el manejo que realiza de la cámara: los actores siempre se dirigen a ella, los sigue, gira, se desliza, pero siempre cobra protagonismo, no la presenta como el lente aislado a través del cual se observa todo lo que sucede.
A lo anterior se le agrega los efectos especiales con los que trabaja el director: desde un hombre que corre ardiendo en llamas (California de Wax), una bola de golf que vuela por la ciudad (Feel the pain de Dinosaurs Jr.) y un perro que vive como un humano en una gran ciudad (Da punk de Daft Punk).


Las técnicas de caracterización, de rotoscopía y de escenografía, combinadas con coreografías, permiten crear atmósferas e historias en unos breves minutos. Spike Jonze no pone como protagonistas del vídeo al grupo o al cantante interpretando el track: algo más, los hace actuar. Parte de un personaje base y de ahí surgen una serie de relaciones.
                                                      videoclip: Drop de The Pharcyde 
En el videoclip de la canción It´s oh so quiet de Björk, la cantante se relaciona con personas que realizan actividades distintas mientras bailan siempre al ritmo del coro y en las estrofas la cámara se enfoca en los gestos de ella.

Por la misma línea se encuentra el video Weapon of choice (Fatboy Slim), donde un hombre aparentemente triste baila por los corredores de un hotel interactuando con los objetos. Aunque los movimientos son dinámicos, el rostro del hombre no modifica sus gestos: permanece con la misma cara estirada y triste.

Las posibilidades narrativas que surgen en los vídeos de Jonze son diversas. Una historia de un enfrentamiento entre policías y ladrones interpretan los integrantes de la agrupación musical Beastie Boys en el video clip Sabotage; dos hombres que juegan golf en la ciudad, utilizando de campo todos los edificios por los que vuela la bola y una banda que toca en una cafetería de los años 50.
En este video de Weezer (Buddy Holly) el uso de las técnicas de montado de escenarios, sumado a largas tomas con un tratamiento pictórico de la imagen, y la caracterización de los personajes en vestuario y maquillaje, logran recrear la atmósfera  típica de los años 50, aún con el color del video y el mobiliario de aquélla época. El uso de perspectivas en la cámara, retrata los movimientos de una chica que practica gimnasia (Elektrobank de The Chemical Brothers).






Las historias que pude contar el director en breves minutos son variadas y muy creativas, pero el deseo hacer historias con relaciones complicadas ha llevado a Spike Jonze a incursionar en la dirección de largometrajes.

domingo, 28 de noviembre de 2010

Chris Cunningham

Con una combinación, de fronteras difusas, entre ciencia ficción y cine fantástico, entre personajes mágicos y tecnología, el director inglés Chris Cunningham ha presentado varios de sus trabajos en video-clips para diversas agrupaciones como Autechre, Aphex Twin, Portishead, Squarepusher, Björk y Madonna.
Los videos de este director muestran una relación manipulada entre imagen y sonido en la que ninguno está subordinado a otro, aunque la música y las imágenes  aparezcan en contrapunto. Como sucede en “Monkey drummer”, en el cual un mono con seis manos toca una batería y varias percusiones más, al mismo timpo que el sonido fluye y moviendo la cabeza en dirección de la mano que utiliza para tocar. Pueden considerarse como actos  reflexivos, como el resultado de lo que un sonido puede causar en una persona: imaginación.
La imaginación que Cunningham explota a través de sus trabajos esculturales y digitales, en los audiovisuales que ha dirigido, apelan a unificar los sentidos, es decir, hacerlos que trabajen juntos sin que uno predomine sobre el otro, a través de la desorientación de los mismos con perturbaciones visuales y auditivas. Es fundir en uno solo la percepción de los sentidos como respuesta a un estímulo acústico y visual, como en “Frozen de Madonna, donde ella se convierte en lobo, en cuervos, en formas.


Tal es el caso del videoclipCome to daddy de Aphex Twin, en el que el paisaje urbano se convierte en el escenario de una destrucción provocada por pequeñas criaturas que obedecen a lo que podría ser su padre: un personaje con aspecto demoniaco que ataca a una anciana con un grito escalofriante y ensordecedor.

Es un juego de oposiciones binarias, de plasmar lo que no es, pero puede ser. De borrar los referentes comunes para darle paso a la creación. Niñas con cara de hombre, que no son tiernas; mujeres con cuerpos esculturales, pero con cara de hombre (“Windowclicker” de Aphex Twin); una pareja que se golpea en un acto sexual (“Flex”) y dos mujeres robots que se unen en un encuentro amoroso (“All is full of love” de Björk).




Chris Cunningham nos presenta temas y plásticas obsesionantes en sus productos audiovisuales: atmósferas grises, frías, escenas de suspenso, formas anatómicas desreguladas, juegos visuales, y un manejo impresionante del color, todo con un marcado acento posmodernista.